En estos momentos mis abogados están
haciendo las averiguaciones correspondientes. No tengo idea del motivo del
allanamiento, espero tener información en las próximas horas. Lo único que me
han dicho es que por una orden de un tribunal militar un pelotón adscrito a la Comisión
Nacional Anti Extorsión y Secuestro allanó
hoy en la madrugada mi residencia, donde se encontraba mi esposa, mis tres
hijos y mi suegra. Yo no me encontraba para el momento del allanamiento, esperaré
el informe de mis abogados para en consecuencia actuar jurídicamente.
Al momento de escribir esta nota
Maria Elisa, mi esposa, se encuentra en el CORE2 junto a los abogados Eloy
Rutman y Gabriel Romero atendiendo una citación que le entregaron en la
madrugada. Quiero advertir que este procedimiento es inconstitucional, pues la
orden la emitió un juez militar y la
jurisprudencia, nuestra Constitución y los tratados internacionales prevén que
los civiles en ningún caso podemos ser juzgados por tribunales militares, ya
que soslaya el principio del juez natural.
Esperemos, pues, tampoco me
consta si existe o no, una orden de captura en mí contra, todo está muy confuso.
Al parecer el allanamiento se origina por una denuncia en la que se decía que
en mi casa yo tenía armas de guerra. Por Dios! Ni tengo ni he tenido. Mis armas
son las de los civiles demócratas: la palabra dicha y la letra impresa.
En el transcurso del día volveré
a escribir una nota para mantenerlos al
tanto de lo que ocurre.
Pablo Aure
No hay comentarios:
Publicar un comentario