jueves, 30 de marzo de 2017

"El Estado soy yo" Comunicado del Consejo de Facultad de Ciencias Juridicas UC


                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                           
UNIVERSIDAD DE CARABOBO
FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS
DIRECCIÓN DE SECRETARÍA DEL CONSEJO DE FACULTAD

"El Estado soy yo"

El Consejo de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas de la Universidad de Carabobo, en Sesión Ordinaria Nro. 345 de fecha 30-03-2017, en uso de sus atribuciones legales conferidas por el artículo 62 de la Ley de Universidades, ante la actual crisis política nacional planteada por parte de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, que trastoca la esencia de la República, viola el principio de la separación de poderes, la voluntad popular y por ende, desconoce el Estado de Derecho, echando por la borda el pacto social expresado en la Constitución de 1999, desechando de la medianoche a la mañana toda una historia política, en la cual ya ni las formas respeta, en una actitud confrontativa, totalitaria atribuye competencias al Poder Ejecutivo en toda clase de materia, asignado funciones legislativas y judiciales, es la expresión de la total locura y fraude consumado, que nos llama a la urgente reflexión de cara a nuestra comunidad universitaria y a la colectividad: Ya no es una infracción hacia determinados artículos de la Carta Magna sino que se ha decretado su muerte.    En el actual momento estamos frente a la inexistencia del cuerpo normativo declarado muerto soezmente por quienes conforman la instancia máxima de garantía, aplicación e interpretación de la Constitución del país.   Sin miedo a la conciencia, a la sociedad que les juzgará en un futuro han cometido de manera continuada la perpetración del desmantelamiento institucional, basados en la fuerza y el autoritarismo, hemos retrocedido como pueblo a sociedades en donde imperó la tesis biológica del más fuerte que impone sus reglas a los más débiles. Los libertadores cuando idearon y soñaron la República, jamás pensaron que dos siglos luego estarían enterrando el sistema político y entregando a un nuevo monarca disfrazado de demócrata, las potestades que tanta luchas y sangre les costó.    
                 Hoy, nuestros estudiantes y compañeros de Academia no sabemos hasta cuándo se podrá sostener este contraste entre lo que enseñamos y la práctica, no estamos armados sino de razones y de ciencia, no poseemos medios de control militar  ni sabemos de conspiraciones, lo que nos queda es la palabra y la ciencia, la sensibilidad y la teoría ahora perpleja. Continuaremos enseñando lo de siempre, la fuente inagotable del Derecho y la política como la concepción de generar ciudadanía, apostamos a tiempos mejores y llamamos a todos a construir la ética en la paz, la justicia y el derecho, la práctica social y el respeto a la Constitución como materialización del entendimiento ciudadano y constructo de todos las tendencias

                Dado, sellado y firmado en el salón de sesiones del Consejo de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas de la Universidad de Carabobo a los treinta (30) de marzo de dos mil diecisiete (2017).


                       DR.  DAVID J. RUTMAN CISNEROS
     DECANO PRESIDENTE  DEL CONSEJO DE  FACULTAD


                                                                           ABOG.   FRANCIA ZABALETA POLO

                                                                             DIRECTORA DE  SECRETARÍA DEL CONSEJO DE FACULTAD

domingo, 26 de marzo de 2017

Luis Almagro, hijo ilustre de la resistencia

¡Hasta cuándo!
Luis Almagro, hijo ilustre de la resistencia
@pabloaure
La resistencia venezolana en algún momento tendrá que hacerle un reconocimiento al Secretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA). En efecto, siempre hemos dicho que los organismos internacionales a través de la historia se han comportado como clubes de amigos que no se solidarizan con los pueblos sino con sus mandatarios. Solo basta revisar el proceder de los antecesores de Luis Almagro para darnos cuenta de que todos se acoplaban a los designios del régimen. Por ejemplo, a Insulsa hasta lo llamaron pendejo, y eso bastó para que luego hiciera mutis con las calamidades que sufrían los venezolanos. Prefirió cuadrarse con el dictador antes que darle la razón a la resistencia.
Desde el año pasado Luis Almagro ha llevado la batuta en el orden internacional reconociendo la verdadera realidad de nuestro país. Impulsando lo que es su deber como Secretario General de la OEA, haciendo valer los instrumentos de la organización para restablecer el orden democrático de los países miembros de la OEA.
Fue Luis Almagro quien pidió la aplicación de la Carta Democrática Interamericana, instrumento que proclama como objetivo principal el fortalecimiento y preservación de la institucionalidad democrática, al establecer que la ruptura del orden democrático o su alteración, que afecte gravemente el orden democrático en un Estado (País) miembro, constituye un obstáculo insuperable para la participación de su gobierno en las diversas instancias de la OEA. Desde hace rato algunas voces hemos denunciado que en Venezuela se ha roto el orden democrático. Y es que no puede haber democracia cuando todo el poder está concentrado en una sola persona, ni tampoco cuando se desconocen las competencias de uno de los poderes constituidos y electo por la voluntad de los ciudadanos. Me refiero al flagrante desconocimiento que el régimen ha hecho del Poder legislativo, cuyas leyes y decisiones son anuladas por un Poder Judicial inconstitucionalmente designado por una Asamblea Nacional que estaba en los estertores, y era presidida por el diputado Diosdado Cabello.    
Hacen más los de afuera que los de adentro.-
El año pasado cuando estuvo bastante adelantada la sanción contemplada en la Carta Democrática, al régimen presidido por Nicolás Maduro –no a los venezolanos-, organizaciones políticas internas se prestaron al juego del régimen. Es decir aceptar sentarse a la mesa para “dialogar”. Vaya afrenta al clamor popular, pues los ciudadanos no querían dialogar porque sabía lo que ocurriría, no era otra cosa que darle oxígeno a un régimen que iba en picada. Pues bien, la MUD se encargó de atajarlo y alargarle la agonía. Le prolongó la permanencia a un dictador pero no calcularon que quienes internamente avalaron esa farsa se suicidaron. Los estudios de opinión así lo demuestran. Maduró quizá subió algunos puntos en popularidad pero su gobernabilidad seguirá pendiendo de un hilo. Ese hilo lo sostiene, aunque ustedes no lo crean, las comparsas a las que se han prestado algunos dirigentes opositores que prefieren esperar que el tiempo transcurra hasta el 2019 para ver si alguno de ellos puede ser el sucesor ¿Ingenua esperanza o planificación negociada? Otra pregunta obligada: ¿qué implica ese negocio? Para el común de los ciudadanos es más muertes, pobreza y mucha tristeza; para los negociadores la respuesta quiero dejarla a la imaginación de los lectores.
Validaciones y firmas.-
Con este asunto de las firmas para promover el fallido referéndum revocatorio y ahora las validaciones de los partidos políticos, no puedo olvidar la lapidaria sentencia del siempre recordado Oscar Yanez, con su denominada “teoría del ÑU”, en la que afirmaba que se pretende enfrentar a un régimen que no es democrático como si lo fuera. Oscar Yanez decía que es como si un torero pretendiera torear un Ñu como si estuviera frente a un toro de lidia. El Ñu es un animal de las planicies africanas que se parece al toro pero no es un toro. Eso lo dijo hace tiempo, quizá ya no estaría vigente porque esto ni es democracia ni tampoco se parece a una democracia.
Ese afán por insistir en utilizar herramientas que indudablemente serán desconocidas por el régimen a través de algunos de los organismos públicos que están a su merced, contrasta demasiado con que no se le haya ocurrido a quienes ejercen la vocería opositora representada en la MUD luchar por la convocatoria de una Asamblea Nacional Constituyente, que no tiene tiempo de expiración y en el supuesto de concretarla no solo saldríamos de Maduro sino que se reinstitucionalizaría la nación. Pero que va,  se enfocan en Maduro, ahora en las gobernaciones y luego en las alcaldías, como si todo lo demás estuviera bien.
Ni el PSUV ni la MUD unidos son mayoría.
El carnet de la patria será utilizado mediáticamente por Maduro para tratar de ejemplificar que los que lo apoyan son muchos más que la oposición, probablemente presente unas cifras abultadas cercanas a los siete millones de carnetizados y dirá comparando con el número de validaciones que apenas la MUD logró validar solo uno o dos millones de militantes (no creo que se llegue a esa cifra); las cuentas nos explican con meridiana claridad que, ni el PSUV ni la MUD representan más del 50% de los electores. Elemental, si somos más de diecinueve millones de electores, eso quiere decir que quienes no sacaron el carnet de la patria y tampoco “validamos” somos más de la mitad que no estamos con ninguna de las opciones que ellos nos presentan. A decir verdad: es la misma opción. Ambos sectores están preñados del mismo populismo que ha destruido los países donde se han impuesto. Por tal razón, es necesario advertir, que cuando decimos esto, no nos pueden etiquetar que apoyamos una tercera vía ¡Claro que no! Y no la apoyamos porque sencillamente tanto el PSUV como la MUD representan la misma vía.

Pablo Aure     

viernes, 24 de marzo de 2017

Jornada de orientación vocacional a estudiantes de colegios privados

Fueron explicadas las modalidades de ingreso al Alma Máter

Secretaría ofreció jornada de orientación vocacional a estudiantes de colegios privados

Pablo Aure, secretario de la UC, informó la incorporación de bachilleres de instituciones privadas por méritos académicos

Rafael Fernández

Tiempo Universitario

Fotógrafo: Cortesía
 
La Secretaría de la Universidad de Carabobo atendió a los estudiantes de 4to y 5to año de bachillerato de los colegios privados UEC Joseph Lancaster; UEC Betania; UEC Montessori; UEC Cristo Rey y el Instituto de Educación Activa (IDEA) del municipio Valencia, a través del Programa Regional de Información y Orientación Vocacional (Priov).

El taller denominado “El perfil del estudiante que ingresa a la UC como estrategia de orientación vocacional”, fue dirigido por Pablo Aure, secretario de la UC y coordinado por Lilian Guevara.
Aure aprovechó la oportunidad para informar que el ingreso por méritos académicos también se hace extensivo a los bachilleres provenientes de colegios privados.  “Desde la Secretaría nos propusimos garantizar la igualdad de oportunidades de todos los bachilleres que estén bajo el área de influencia de la UC, al lograr que fuese aprobado en Consejo Universitario del pasado lunes, la incorporación al ingreso por méritos académicos de bachilleres provenientes de colegios privados, y no solamente a los egresados de colegios públicos, como venía ocurriendo en los últimos años”, aseguró.
A los jóvenes también se les explicó las otras modalidades de ingreso al alma máter carabobeña, y las diferentes oportunidades de estudio que esta ofrece, a través de una ponencia que incluyó el uso de vestuario alusivo a las distintas facultades y sus carreras.
Por último, Guevara detalló que el trabajo que se realiza desde la Secretaría con estudiantes de bachillerato, tiene como objetivo principal evitar se incremente la deserción universitaria de los jóvenes, por no haber escogido correctamente la carrera a estudiar.

domingo, 19 de marzo de 2017

Esquizofrenia opositora

¡Hasta cuándo!
Esquizofrenia opositora
 @pabloaure
Indagar sobre la situación venezolana es una tarea sumamente compleja que más que de la participación de politólogos o de sesudos analistas, requerimos de la intervención inmediata de psiquiatras, que interpreten tanto a actores políticos como al común de los ciudadanos.
Los más notables voceros de la Oposición, concentrados en esa rara especie “unitaria” plasmada en la MUD, no dudo que aparentan sufrir el trastorno de la esquizofrenia, pues perciben la realidad de una manera confusa. Hablan de dictadura pero al mismo tiempo se lanzan a una batalla de validación de sus organizaciones políticas, con el entendido de que serán capaces de desplazar a la dictadura con sus tarjetas electorales recién invalidadas y ahora vueltas a validar ¿No les parece cosa de locos? Prefiero pensar que están desequilibrados, para no tildarlos de socios de la tiranía ¿A quién se le puede ocurrir que un tirano te ilegitime (inconstitucionalmente) para después darte chance de volverte a legitimar bajo las condiciones que él imponga, -y  lo aceptes mansamente-? Pero si eso de por si es una candidez, mayor sería la “ingenuidad” si tienes la esperanza de que luego te reconocería como ganador en unas eventuales elecciones, que de acuerdo con los tiempos aproximados por los procesos de invalidación, validación e impugnación,  seguramente no serán este año.
Mientras el régimen persigue a los panaderos, ofrece los “claps”, denuncia golpes de estado y se montan operativos para sacar el carné de la patria, el mayor grueso de los ciudadanos se mantiene distraído en colas para satisfacer sus necesidades básicas y muy atentos para evitar ser víctimas de un atraco. Mientras eso ocurre -y todos lo percibimos-,  dirigentes opositores desesperadamente envían mensajes a tutilimundi para que se inscriban en sus partidos y poder presentarse como opción frente a la dictadura, claro está, mediante un proceso electoral. ¡Díganme si no es de locos esto!
Indudablemente no son los marines de USA ni la Carta Democrática Interamericana sino psiquiatras los que necesitamos para tratar la esquizofrenia colectiva. No solo por el alocado discurso opositor sino también de algunos oficialistas, porque hasta insisten en afirmar que alguien vive cuando años atrás lo lloraban y sus presuntos restos  fueron expuestos en capilla ardiente y supuestamente “sembrados” en el Cuartel de la Montaña. Les vuelvo a preguntar: ¿es o no de locos esto que vivimos?
Aterricemos en la cordura.-
Los que dirigen la nación cuando dicen que harán lo que sea para mantenerse en el poder, créanme que no están locos, así como tampoco lo están algunos vivarachos que desde la oposición “validan” sus partidos para hacerles comparsa. Los del régimen indudablemente no tienen escrúpulos pero eso no significa que estén turulos. Esto es muy importante dejarlo claro a la hora de enfrentarlos a la justicia, no vayan a venir con el cuento y argumentar que no estaban en sus cabales cuando robaban y ordenaban encarcelar o asesinar. Loco estaríamos todos, si pensáramos que de estos patoteros saldremos vía electoral, ¡yo te aviso chirulí!
El año pasado el régimen celebraba y reía a carcajadas cuando a Capriles (secundado por algunos “genios” de la MUD) se le ocurrió la “brillante” idea de promover el referéndum revocatorio, y de manera absurda millones se embarcaron en esa pésima idea. Caímos en el chantaje para evitar ser catalogados como divisionistas. Ahora, Maduro sigue supremamente emocionado con ese temita de la validación de sus “enemigos”. O sea pareciera escucharlo en tono de chiste exclamar: “señores de la MUD si quieren venir por mi, no tienen otro remedio que validarse” ¿qué carrizo hace falta para que todos en el país se den cuenta de que tanto el régimen como los que le hacen el juego se burlan de los ciudadanos.
Mi propuesta.-
Observar a Venezuela en dos toletes, uno; claramente conformado por el régimen y sus aliados -entiéndase los que le hacen el juego-, y el otro, los que lo enfrentamos. Con la siguiente observación: no faltarán aquellos que tilden de anti políticos a los que desvelen la sociedad que existe entre el régimen y los enchufados disfrazados de opositores que apuestan a la eternidad del socialismo del Siglo XXI.
Una vez tengamos claros esos dos sectores, hacer la tarea que todavía no hemos hecho por más que la hayamos anunciado. Me refiero a la organización. Nunca arrojará buenos resultados aquella organización donde existan elementos perturbadores que no tienen los mismos intereses u objetivos, que no es ninguno distinto al de salir de esta pesadilla. En consecuencia, cuando ambos segmentos estén claramente identificados, comenzar a hacer peso para debilitar a lo único que le teme el régimen que es su gobernabilidad. En efecto, Maduro puede tener cero de popularidad pero si por nuestras acciones equivocadas le permitimos que siga mofándose de los ciudadanos puede permanecer a perpetuidad en Miraflores, y el tiempo lo pasaremos recogiendo firmas para luego validarlas. Seguiremos escuchando discursos repetidos de aquellos “paladines opositores” (firmen y ahora validen para liberar a los presos políticos), otros, confundidos por la locura de quienes dicen ser opositores esperarán el carné de la patria o una caja de clap, o el día del terminal de la cédula para ´poder comprar dos kilos de harina, dos botellitas de aceite, cuatro rollos de papel tualé o medio kilo de pasta.
Sabemos que la tarea es larga, pero así se incomoden quienes dicen estar de nuestro lado, a ellos, también tenemos que enfrentarlos porque son los pilares de la dictadura que desgraciadamente están camuflados de opositores. La protesta debe ser continua, inteligente y de manera coordinada para no darle oportunidad al régimen -a través de sus esbirros- de poder lesionar o apresar a quienes constitucionalmente salgan a manifestar su descontento.
No podemos perder más tiempo y tenemos que comenzar a tender puentes, si es que acaso todavía no lo han comenzado. Puentes con civiles rojos o verdes militares. Muchos “oficialistas o institucionalistas” quieren salir de este berenjenal pero prefieren callar o defender lo indefendible antes que caer en manos habilidosas, ávidas de poder y que padecen de los mimos vicios de los que originaron esta tragedia.
Compromiso ciudadano.-
Que cada rancho,  casa, barrio, edificio y vereda se convierta en una escuela de rescate de la identidad nacional cuyas herramientas sean la palabra y la escritura. Abracemos la causa Venezuela. Ábranle la puerta a la esperanza y a la conciliación. Todos son necesarios. Cuando digo todos, son todos los ciudadanos de buena voluntad. Aquí incluyo nuevamente a civiles y militares. Maduro y todo el régimen que lo sostiene están demasiado claros de que su permanencia dependerá de nuestra organización, y de aquella unión cívico-militar de la que tanto hablaba el finado Hugo Rafael. Que se entienda muy bien: no hablamos de promover un golpe de estado, sino de restablecer el hilo constitucional que desde hace rato lo rompió esa caterva de delincuentes que ha venido oprimiendo a los ciudadanos ansiosos de tener libertad de oportunidades y de ese modo poder alcanzar su prosperidad sin depender de las dádivas del régimen que los ha sumergido en el atraso y cada día los esclaviza más.    

Pablo Aure 

lunes, 13 de marzo de 2017

La Universidad no se rinde

¡Hasta cuándo!
La Universidad no se rinde.
@pabloaure
La compleja situación venezolana cada día adquiere una asombrosa apreciación. Parece un cuadro extraño, extraído del surrealismo. Vemos colas para sacar el “carné de la patria”, colas en los supermercados y en las panaderías. Desde hace algunos días, y no obstante denunciar que padecemos una cruenta tiranía, también observamos colas para “validar” algunos partidos políticos. Constantemente circulan por las redes fotografías  de muertes por encargo, o en circunstancias desconocidas. Ya es común observar videos o ser protagonistas pasivos de atracos. A nadie sorprende la gran cantidad de niños en brazos de mujeres que no parecen ser sus madres o familiares pidiendo limosnas en los semáforos, cuidadores de carros en plenas vías públicas con un cartel en el cuello indicando la tarifa de vigilancia. Esa es parte de la Venezuela que hoy tenemos. Pero así como vemos las anteriores miserables escenas, por otra parte nos topamos con inauguraciones de majestuosas obras o entregas de casas. Mientras todas estas contradicciones ocurren -y mucho más- nuestros presos políticos siguen presos. Solo algunas voces en la distancia se escuchan como para enaltecer la figura de alguna organización política, pero no para denunciar la barbarie que está instaurada en el país desde hace casi cuatro lustros.
Es menester la coherencia para lograr los objetivos y no distraernos en lo que nos debería ocupar. Somos muy dispersos en las luchas. Claro, no tengo dudas de que es una estrategia perfectamente diseñada por la dictadura: crear varios focos de distracción mientras sigue avanzando en sus objetivos destructores.
Universidad al servicio de la patria.-
En defensa de nuestra comunidad.-
Sin pretender distraernos, aún más de lo que estamos, debemos retomar un aspecto vital para nuestro país, se trata del asunto universitario. En tal sentido me referiré a varios aspectos. El primero: al secuestro en las mazmorras de una cárcel militar de un catedrático de nuestra centenaria Casa de estudio. En efecto, el doctor en economía Santiago Guevara, permanece de manera arbitraria detenido desde hace más de tres semanas bajo órdenes de un juez militar. Su detención está fundamentada en lo recogido de un expediente fabricado en el basurero de la mentira y de la vergüenza. No puedo calificarlo de otra manera. Decir que Santiago Guevara es traidor a la patria, no solo atenta contra la inteligencia de los ciudadanos, sino que es una afrenta a la Universidad de Carabobo, pues señala a nuestra alma máter como una institución conformada por traidores a la patria, cuando la realidad es todo lo contrario: que somos una institución al servicio de la patria, de donde no solamente egresan excelentes profesionales, sino que sus profesores forman ciudadanos al servicio del país.
No olvidemos nuestras luchas por la libertad de los presos políticos, en este caso por el científico de la economía Santiago Guevara, el silencio de un universitario ante esta monstruosidad “milico-judicial” nos disminuye como universitarios cuya esencia primordial  es la pluralidad y la libertad. La irreverencia y la solidaridad deben acompañar nuestros pasos hasta conquistar la libertad plena del profesor Guevara. Hagámonos respetar, de lo contrario estaremos siempre expuestos a las tropelías gubernamentales.
Por el rescate de la dignidad.-
Compañeros universitarios, de manera sistemática el régimen ha venido horadando la dignidad universitaria. Los sueldos son de hambre y el presupuesto asignado a las instituciones universitarias son simbólicos como para verlas agonizar con el transcurrir del tiempo. Imposible mantenerlas con lo que desde la administración central se les asigna desconociendo desde hace rato su autonomía que claramente establece que el presupuesto lo aprueba el Consejo Universitario, desgraciadamente el régimen se mofa de nuestras peticiones y a cuenta gota nos envía uno que otro recurso luego de largas horas de explicaciones y adulaciones.
La investigación cada día va en retroceso, no puede ser de otra manera, no tenemos los recursos necesarios para adquirir reactivos. No hablaré de la infraestructura que acusa la inclemencia del tiempo y se nos dificulta repararla. A pesar de la escasez permanecemos activos. No puedo ocultarlo, estamos debilitados. El turno nocturno peligra porque la delincuencia está desbordada, y tampoco tenemos las unidades de transporte. No son suficientes para trasladar a nuestros bachilleres. Mientras el Ejecutivo nacional hace alarde de la adquisición de flotas de material de guerra, los universitarios clamamos por unidades de transporte para trasladar y educar a quienes deberán tomar las riendas del país  más temprano que tarde.
Nos quieren ver sumergidos en el mar de la anarquía o en el de la deslegitimación. A Dios gracias,  aquí en la Universidad de Carabobo nuestra rectora Jessy Divo ha sido una estratega para mantener a flote una embarcación que desde hace bastante tiempo han intentado hundir ¡No lo lograrán!
Si queremos hacernos respetar, lógicamente debemos plantarnos como verdaderos universitarios ante un gobierno que apuesta a nuestra destrucción. Cuando digo plantarnos es hacer retroceder al adversario (en este caso al enemigo) hasta deponerlo con la fuerza de la razón y el espíritu que debe florecer en cada uno de nosotros como formadores del presente y del futuro. Tenemos las herramientas necesarias para lograrlo. Somos millones y nos asiste la verdad. Solo nos queda organizarnos y unirnos sin mezquindades.
Fundación transporte UC.-
Para finalizar no puedo dejar de mencionar que en el próximo Consejo Universitario propondré la creación de la Fundación Transporte UC, con la única finalidad que con el aporte que ella reciba poder mantener en la medida de las posibilidades algunas unidades activas para coadyuvar en las reparaciones menores, y evitar ver varados bien sea en la calle Cedeño o en La laguna de Faces a estudiantes que anhelan llegar a la UC y luego devolverse a sus hogares.

Pablo Aure