Ayer 21 de diciembre de 2013 en la Universidad de Carabobo culminamos
lo que siempre hemos denominado la cosecha de la academia. A pesar de haber
salido de vacaciones el 19 de este mes, cumplimos con el compromiso que desde
la Secretaria asumimos con los nuevos graduandos de medicina (Aragua y La
Morita), Bioanalisis (Aragua) Enfermería (Aragua y Bárbula) educación, licenciados
en Biología, Computación, química física y Matemática de FACYT, Odontólogos,
con las carreras técnicas de la FCS Citotecnología, Histotecnología, Registro y
Estadística, Terapia Psicosocial e Imagenología, al igual con los
postgraduandos Doctores, Magister y especialistas. En total casi 3500 nuevos
profesionales al servicio del país egresaron de la Universidad de Carabobo entre
el día 4 de diciembre y ayer 21 de diciembre.
Fue un largo batallar, pero gracias al esmero especialmente
de los trabajadores de la Dirección General de Asuntos Estudiantiles (DIGAE)
que asumieron el compromiso de trabajar de noche y de día incluidos sábados y domingo
se hizo posible la realización de los actos de grado. Mi eterno agradecimiento a
Thais Gutiérrez, Rosaura Ochoa, Ismenia Quvedo y a sus compañeros que no las
abandonaron en esas largas jornadas de trabajo, con el único interés de su
compromiso universitario.
Recordemos que este año fue muy accidentado pues tuvimos una
protesta docente que paralizó la UC por casi cuatro meses, también padecimos por
largo tiempo un horario de conflicto organizado por los empleados que
mantuvieron su jornada laboral solo por tres horas al día. ¡A pesar de todo
ello lo logramos! gracias a muchos trabajadores empleados, obreros y profesores
que saben y entienden que por encima de cualquier interés o reivindicación
(desde luego justa) está el derecho de los estudiantes de sus familiares y del
compromiso con el país.
Nuestra filosofía siempre ha sido que la Universidad se
defiende trabajando y que el oficio de profesor universitario más que una
profesión es un apostolado, por eso mientras Dios nos de salud, seguiremos
luchando por esos principios, y sintiéndonos orgullosos que no obstante todas
las diferencias que podamos tener en nuestra Casa de Estudios, a la hora de
unirnos para contribuir con el país, nos abrazamos en la misma causa.
Mi especial reconocimiento a nuestra rectora Jessy Divo de
Romero, mujer de temple y compromiso, que valora a los trabajadores
comprometidos con la institución. Incansable para enfrentar el desafío que se
le presente, por muy dificl que este sea, allí está ella de frente y sin miedo
como una verdadera universitaria. Dios la bendiga.
Se nos va el 2013 y continuamos al frente de la UC, Dios
quiera el Niño Jesús para el 2014 traiga aires democráticos y la autoridades
que hoy ocupamos cuadros directivos seamos renovadas democráticamente, pues
todas las instituciones y más una universidad debe ser republicana cuyos
gerentes deben ser rotados periódicamente. Esa es la Universidad en la que creemos
y defenderemos siempre. Somos una casa que debe vencer la sombra del
oscurantismo nepótico. Debemos renovarnos constantemente. Sin olvidar el pasado
debemos avanzar con nuevas ideas y nueva producción de conocimiento.
La Universidad de Carabobo no es una empresa en la que
solamente tenemos que estar pensando en el quince y en el último de cada mes.
Eso no es una Universidad. La universidad es un sitio que reúne a profesores y
alumnos en búsqueda de la verdad y evidentemente debe estar comprometida con
sus trabajadores y sobre todas las cosas con sus estudiantes que son el
presente y futuro de este gran país que se llama Venezuela.
Entiendo y respeto a quienes tienen otra manera de pensar, a quienes
algunas veces proponen paros para presionar al gobierno. Los respeto, pero
jamás podré compartir ese tipo de presión porque condenamos a los estudiantes y
a sus padres a un atraso irrecuperable. Pensemos en otras formas de protestar y
obtener nuestros justos reclamos, pero les pido de corazón que jamás volvamos a
pasar por esa enojosa situación de paralizar las universidades. Porque una Universidad
parada es una Universidad callada.
Finalmente, a mis compañeros, obreros, empleados, estudiantes
y profesores les deseo una feliz Navidad y lo mejor para el próximo año 2014 en
el cual tendremos que navegar por mares tormentosos. Pero recuerden: los
universitarios sabemos crecernos en momentos de dificultades. Eso sí, por favor,
rememos hacia el mismo lado. Apartemos intereses propios y apostemos al bien
colectivo.
Junto lo lograremos.
Con la mano en el corazón les digo: que Dios bendiga a nuestra
Alma Mater carabobeña.
Prof. Pablo Aure
Secretario UC
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