sábado, 4 de julio de 2015

La Venezuela de los Capaces/ @DimitryBelov

La Venezuela de los Capaces/ Dimitry Belov

Leer la ley orgánica de la administración pública en Venezuela, produce la misma nostalgia que leer cualquier otra ley, se siente uno despechado ver la brecha tan grande que existe entre lo que puede ser nuestro país y simplemente no es.
Si bien es cierto que los narco jerarcas se empeñaron de manera exitosa en prostituir todas y cada una de las instituciones que tocaron en el país, también es cierto que prostituyeron las carreras en la administración pública. Basta hacer un paneo de la oferta del circo electoral a las primarias oficialista para observar, más que con preocupación con desasosiego, el desprecio que sienten por construir un país de valores. La oferta en algunos casos incluyó criminales, vedettes y mafiosos convictos.
Sin embargo cuando vemos para este lado de la acera, tampoco es que tenemos el día soleado y el viento en popa. Admitamos que algunos de “nuestros candidatos“ lo que les falta son el parche y el lorito en el hombro. Algunos candidatos a alcaldes eternos ni tienen idea de que significa un plan de desarrollo urbano. Algunos de los “elegidos“ para concursar por la MUD a la asamblea, tampoco tienen idea de cuales son las funciones de un legislador.
Con este panorama, es deber de los ciudadanos exigir, apenas recuperemos las instituciones, una profunda modificación de la ley orgánica de la administración pública. Donde se le anexen requisitos bastante específicos de cual deben ser los logros académicos de aquellos que concursen para los diferentes cargos en los diversos niveles de gobiernos. La propuesta es que en las diferentes universidades públicas, existan de manera obligatoria, programas de preparación completos y formales para aquellos que manifiesten su intención de formar parte de los diferentes cargos, sean o no de elección popular. Llegando incluso a exigir un nivel académico acorde a aquellos que quieran lanzarse a los diferentes centros de estudiantes.
De esa forma pues, jamás tendríamos que escuchar de nuevo a un ministro de interior y justicia, como Gustavo González López,  hablando estupideces acerca de un método cualitativo y cuantitativo del modelo matemático aritmético para el registro de los crímenes que ocurren en el país y que no quieren mostrar. El planteamiento es simple, un individuo así no tendría cabida en la Venezuela de los Capaces a menos que estudie, se prepare y apruebe los programas.
El tema de llevar a cabo los programas formales de preparación a través de las universidades públicas es vital para que los defensores de la incapacidad no puedan alegar discriminación alguna. Aquel que muestre su intención en prepararse, que así lo haga, de manera gratuita, eso si, que demuestre con resultados que es capaz completar los requisitos antes de ni siquiera optar. Si no lo hace, se le da la oportunidad a otro.
Les confieso que veo con mucha esperanza el hacer posible esta propuesta. Aplaudo los esfuerzos que hacen diferentes organizaciones en generar programas de preparación para que nuestra juventud pueda afrontar los retos que nos depara el futuro como nación. Ver a los sectores académicos uniéndose para generar propuestas a la población, saber que concejales activos se preparan en especializaciones en gestión municipal y tributaria, y presenciar como cientos de jóvenes, algunos menores de 20 años, acuden a toda jornada donde se les de la oportunidad de prepararse a formar su liderazgo por el país, simplemente es algo de agua entre tanta sequía. Aún en la hora más oscura siempre hay alguna estrella que brilla. Muy pronto dejaremos de elegir entre el malo y menos malo. La hora del amanecer de la conciencia se acerca. El día en que elijamos entre los más preparados es cuestión de pocos años. Faltan todavía un gran parto que atender, no me refiero al electoral, posiblemente deje una herida, pero cuando ese bebé nazca estoy seguro que habrán manos capaces para atenderle hasta que se fortalezca y logre su independencia. 

@dimitrybelov

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