Cero caramelo de cianuro

Cero caramelos de cianuro, la perversidad mayor está contenida en los decretos 664 y 666, bien venida la devolución del Teatro Municipal, eso es exactamente igual cuando alguien que te haya robado te devuelve lo que te robó.

Ahora debemos seguir luchando por la derogatoria de los decretos que despojan a los valencianos de su Parque Recrecional Sur y su Monumental plaza de Toros, también lucharemos por revocar e nombramiento de una autoriad única impuesta a dedo para que realice actividades que le competen al municipio.

Amigos, no tengo dudas que le verdadro interés que subyace en esos decretos 664 y 666 es estrictamente económico, encuchufados pretenderán haciendo negocios con la construción de viviendas y dizque actividades turisticas.

Es lamentable que un gobernador que dice ser valenciano y defender la Constitución la ciolente burlandose del pueblo qe lo eligió. La CRBV prevé la descentralización, no debe permitir que se lleven nada de Carabobo; al conrario debería empeñarse en rescatar y solicitar los peajes, puertos y aeropuerto, para que esos ingresos se inviertan en vigilancia de las carreteras y autopistas, en patrullas grúas, asfaltado y alumbrado. Pero que vá este es un gobernador cenralizador que nada le nteresa el legado que ueda dejarle a los valencianos.

Saludos

@pabloaure

PD. Les acompaño una enrevista que ayer me hiciera el portal de noticias www.noticierodigital.com

Pablo Aure y la devolución del Teatro Municipal: Aún faltan el Parque del Sur y la Monumental, y derogar el perverso Decreto 666

21 Enero, 2014

Enrique Meléndez / especial Noticiero Digital / 21 ene 2014.- El profesor Pablo Aure considera como una victoria el que le haya sido devuelto a la Alcaldía de Valencia la administración de su Teatro Municipal. “Es una victoria parcial”, agrega.

opinan los foristas

Según Aure, todavía queda por recuperarse la administración del Parque Recreacional Sur y la Monumental de Valencia que también pasaron a manos del gobierno mediante el Decreto 664, y menciona que existe un tercer decreto, el 666, que es aún más perverso.“Porque mediante la engañosa idea de que se dicta para nombrar una autoridad única de una ciudadela en construcción – denominada Hugo Chávez – se intervienen las parroquias Félix Peña, Rafael Urdaneta y Santa Rosa; precisamente las parroquias más populosas de Valencia”, quitándole competencias a la Alcaldía.Así lo dijo también Secretario rectoral de la Universidad de Carabobo y miembro de la ONG “Valencia se respeta” en una conversación con Noticiero Digital.

Ha trascendido la información de que le fue devuelta la administración del Teatro Municipal a la Alcaldía de Valencia, que le había sido confiscada por el gobierno nacional. ¿En qué influyó el hecho de la reunión que sostuvo el alcalde recién electo Miguel Cocchiola con el gobernador Francisco Ameliach?
-Yo creo que más que este diálogo, influyó el hecho de la presión ciudadana; las exigencias de la gente para que Valencia sea respetada. Recordemos que el 10 de enero hubo una manifestación frente a las instalaciones del Teatro Municipal; donde la organización “Valencia se respeta” estuvo acompañada por artistas, poetas y profesionales en una manifestación pacífica que llevamos a cabo para exigir que se nos devolviera el Teatro.
-Previamente, el 30 de noviembre nosotros acudimos al Capitolio regional, a los fines de solicitar una entrevista con el gobernador Ameliach. Bueno, todavía estamos esperando la respuesta; sin embargo, por la cuenta Twitter ayer el gobernador Ameliach dio a conocer que, en reunión con Nicolás Maduro, se revirtió el decreto 665 que era el que despojaba a la municipalidad de Valencia la administración de un bien de su patrimonio.

-Recordemos que a finales del siglo XIX ese teatro municipal fue donado al pueblo de Valencia. Bueno, ayer no sé cuáles fueron las razones de peso que privaron para que Maduro revirtiera ese decreto. Pero lo que sí reconoce, al revertirse ese decreto es que, además de ser inconstitucional, no gozaba de la simpatía del pueblo valenciano.

-Asimismo, como se ha revertido el 665, decreto inconstitucional, ilegal, absurdo y confiscatorio, nosotros seguiremos en la calle, protestando pacíficamente para que se nos devuelvan otras competencias que nos fueron confiscadas también.
¿Cuál es la significación desde un punto de vista cultural que tiene ese teatro para los valencianos?

-Se trata de un ícono para la cultura de los valencianos; un monumento incluso, que fue declarado patrimonio nacional en la época de Raúl Leoni. Yo creo, incluso, que el presidente tuvo una mala información a ese respecto, es decir, que fue declarado monumento nacional porque una cosa es que se trate de un monumento nacional, con autonomía propia, y otra cosa es que pase a ser administrado por un Ministerio de la Cultura.

-Por lo demás, su significación histórica estriba en la circunstancia de que fue un teatro donado a finales del siglo XIX a la municipalidad y al pueblo de Valencia, para representar allí obras teatrales y todas las manifestaciones artísticas y de diverso género.

-Nosotros como ciudadanos estamos en la obligación de proteger nuestro patrimonio, nuestras tradiciones, y es por eso que hicimos; primero, una protesta con algunos artistas aquí en las puertas de nuestro Teatro Municipal, y que es lo que yo creo que fue decisivo para que se revirtiera el decreto 665, y luego acudimos a solicitar una entrevista con el gobernador Ameliach.

También, para poder ser declarado monumentos histórico tiene que ser una joya arquitectónica, ¿o no? ¿Quién fue el arquitecto de la obra?
-En 1887 se decide llevar a cabo el proyecto de edificación del teatro con la participación del ingeniero Núñez de Cáceres y del arquitecto Antonio Malaussena, y cuyo diseño fue inspirado en el esquema del Teatro de la Opera de París. También en su decoración participó Antonio Herrera Toro. Por cierto, en la década de 1980 fue restaurada su planta física.
¿Se conserva en buen estado?

-Se conserva en buen estado. Yo no sé cómo está actualmente; porque aquí tuvimos un alcalde; bueno, que le dio una utilización parecida a la que el gobierno le ha venido dando al Teatro Teresa Carreño de Caracas y eso, precisamente, era lo que queríamos evitar los valencianos, que se convirtiera nuestro teatro en un espacio para el proselitismo del partido oficialista.

¿Ustedes también están reclamando otras obras que les fueron confiscadas también?

-El día 10 de diciembre, es decir, dos días después de que perdió el candidato de Ameliach aquí en Valencia se emitieron tres decretos el 664, el 665, y el 666. El primero le arrebata la competencia a los valencianos la administración de Parque Recreacional Sur y la Monumental de Valencia. Eso fue construido con dinero del municipio; de los valencianos. Bueno se pasó por un decreto, de un plumazo su autonomía, y con los mismos fundamentos con los que nos despojaron del Teatro Municipal, para ser administrado por el Ministerio del Turismo o algo así.

-Ese decreto (el 664) sigue vigente pues el que revirtieron el pasado lunes fue el que despojaba a los valencianos de su Teatro Municipal. Pero hay otro decreto, el 666, que es aún más perverso; porque, mediante la engañosa idea de que se dicta el mismo para nombrar una autoridad única de una ciudadela en construcción; denominada Hugo Chávez, se intervienen las parroquias Miguel Peña, Rafael Urdaneta y Santa Rosa; precisamente las parroquias más populosas de Valencia.

-Y es por eso, que se nombra a una autoridad única que no tiene otro mérito que ser el hermano de Francisco Ameliach. De modo que estamos ante un decreto nepótico que le da facultades a la autoridad única en lo que constituye la reserva moral o constitucional del municipio para la ordenación territorial; que se trata de una atribución que sólo está reservada a la municipalidad, y de modo que esa autoridad única, gracias a ese decreto puede darse el lujo de modificar las variables urbanas enmarcadas dentro de esas tres parroquias. Eso, por supuesto, soslaya o violenta artículos constitucionales que le dan esa competencia al municipio. Bueno, contra esos decretos seguiremos luchando; esto es, el 664 y el 666 para que Valencia se respete. Eso pudiéramos decir que se trata de una victoria parcial, es decir, la devolución del teatro; de modo que tenemos que seguir luchando, y no bajar la guardia por la ciudad de Valencia.

¿Eso significa que más pesó la protesta ciudadana que las muestras que ha dado el gobierno, en torno a la posibilidad de llevar a cabo diálogos, no sólo como el que realizó Cocchiola con Ameliach, sino también a los que está invitando el presidente Nicolás Maduro? ¿Usted cree en la sinceridad del gobierno, en ese sentido?

-Sí, y todos en conjunto yo creo que debemos actuar. Esto no es la tarea de un movimiento en particular. “Valencia se respeta” es una organización que está integrada por distintas personalidades y de distintos partidos. Surgió a raíz de la promulgación de estos tres decretos, y, en ese sentido, seguiremos trabajando en conjunto; por el bienestar del pueblo, y el respeto a las tradiciones, patrimonio y los principios valencianos.

-De hecho, voy a aprovechar para instar para el próximo jueves 23 de enero, precisamente, al lado del Teatro Municipal a que asistan a un acto que haremos para conmemorar la caída de un dictador militar. El movimiento “Valencia se respeta” está cursando las invitaciones. Imagino que esto también lo están haciendo en otras partes del país. Pero nosotros hemos creído que hay que celebrar esa conmemoración cívica, pacífica por el rescate de la democracia.

-Movimientos estudiantiles, organizaciones sindicales, movimientos culturales, partidos políticos han confirmado que se van a sumar a esta convocatoria