viernes, 3 de octubre de 2025

Voto salvado Prof. Pablo Aure contra la opacidad en el manejo de recursos UC

Voto Salvado sobre la aprobación de la reforma estatutaria de la Fundación Teatro Dr. Alfredo Celis Pérez


Señora presidente y demás miembros del Consejo Universitario de la Universidad de Carabobo._

En atención al punto planteado como “Proyecto de reforma de la directiva de la Fundación Teatro Dr. Alfredo Celis Pérez de la Universidad de Carabobo” (sic), que fue aprobado en la sesión del Consejo Universitario celebrada hoy 3 de octubre, dejo constancia de mi disconformidad con la decisión mayoritaria de este cuerpo colegiado, por lo cual salvo el voto, y lo fundamento en las siguientes razones:

En los últimos años, se ha evidenciado en la Universidad de Carabobo que ha proliferado la creación de Fundaciones destinadas a la gestión de ingresos, las cuales operan bajo un esquema que reduce significativamente los controles sobre el uso de los recursos; otorgándosele a sus directivos una discrecionalidad absoluta que genera serias dudas sobre la transparencia y equidad en la administración de dichos fondos.

Hemos constatado que este modelo, lejos de contribuir a la solución de los problemas colectivos de la comunidad universitaria, parece beneficiar principalmente a una élite administrativa, desatendiendo las necesidades prioritarias de los trabajadores. Es menester resaltar que la Fundación Teatro Dr. Alfredo Celis Pérez recibe significativos recursos económicos por el alquiler de sus espacios, lo cual se evidenció con suficiente claridad recientemente durante los meses de julio y agosto, épocas de graduaciones de diversas unidades educativas de Carabobo, así como de las propias ceremonias de graduación de nuestra alma mater. Resulta paradójico y, en cierto modo, un contrasentido, que los futuros egresados de la propia Universidad de Carabobo que los ha formado deban pagar a la Fundación para utilizar el auditorio el día de su graduación, sin que se observe una redistribución clara y transparente de estos ingresos en beneficio de la comunidad universitaria.

Uno de los problemas más críticos que enfrentan los trabajadores de la Universidad de Carabobo es el insuficiente nivel salarial, agravado por la ausencia de un seguro de hospitalización, cirugía y maternidad (HCM). En este sentido, se ha planteado en reiteradas ocasiones la asignación de un bono complementario, con los recursos provenientes de los ingresos propios que generan las Fundaciones, así como también otras dependencias con Unidades Generadoras de Ingreso (UGI). Esta propuesta fue respaldada por la asamblea de trabajadores celebrada el 8 de julio de 2025 en el patio del rectorado. Por mandato de la referida asamblea, dicha propuesta fue elevada al Consejo Universitario pero lamentablemente fue desatendida e incluso retirada de la agenda por instrucciones de quien preside este cuerpo, lo que refleja una preocupante falta de prioridad hacia las necesidades de los trabajadores.

Por otra parte, considero inaceptable que los administradores de estas Fundaciones, quienes probablemente perciban dietas o primas, gocen de beneficios que contrastan abismalmente con los precarios salarios de los empleados, obreros y docentes, evidenciando una clara falta de equidad.

La administración pública debe regirse por los principios de transparencia, rendición de cuentas y justicia en la distribución de recursos (Art 141 CRBV). Sin embargo, en el caso de muchas de las Fundaciones adscritas a la Universidad de Carabobo, se percibe un preocupante oscurantismo en el manejo de los fondos, los cuales, no obstante estar sujetos a un control de los entes competentes, en la práctica esos controles suelen activarse luego de una denuncia formal.

Por lo anterior, abogo por una revisión exhaustiva del modelo de creación y funcionamiento de las Fundaciones vinculadas a la Universidad de Carabobo. Más aún, mientras sigan operando, propongo se publique periódicamente el estado financiero y evaluar la disolución de aquellas cuya existencia carece de justificación clara, ya que los recursos que administran deben ser gestionados directamente por la Universidad. Esto garantizaría un control más riguroso y una distribución equitativa de los fondos, priorizando el bienestar de la comunidad universitaria, especialmente de sus trabajadores, cuyos ingresos son insuficientes para cubrir sus necesidades básicas.

Lejos de cumplir con su propósito esencial de generar beneficios para la Universidad de Carabobo, muchas de estas fundaciones, incluida la Fundación Teatro Doctor Alfredo Celis Pérez, parecen diseñadas para favorecer a quienes las administran, invirtiendo así su función original. Los recursos que le ingresan como los provenientes del alquiler de espacios, que son cuantiosos, no se destinan a atender las necesidades urgentes para mejorar las condiciones laborales y beneficios socioeconómicos del personal universitario, sino que escapan a los controles adecuados, contraviniendo los principios de una gestión pública responsable.

Por las razones expuestas, salvo mi voto en contra de la aprobación del punto de la agenda relacionado con la Fundación Teatro Doctor Alfredo Celis Pérez, hasta que se revisen a fondo las políticas de creación, funcionamiento y fiscalización de las Fundaciones, y se garantice que los recursos gestionados, incluidos los generados por el alquiler de los espacios del teatro y otras actividades que generen ingresos, se destinen efectivamente al bienestar colectivo de la comunidad universitaria, con especial énfasis en las necesidades de los trabajadores.

En Valencia 3 de octubre de 2025.