¡Hasta cuándo!
Bullying a los corruptos
@pabloaure
Mientras la ira del régimen no se hace esperar contra los
que a diario salen a manifestar su descontento acá en el país, los venezolanos
que están en el exterior han decidido perseguir a los enchufados y a sus hijos
para cantarle en su cara que se mantienen fuera de nuestras fronteras con
dinero producto de la corrupción. Es difícil
tratar de desarrollar este tema, pues jamás podemos justificar reacciones
violentas contra nadie, ni fomentar el odio, pero resulta casi imposible no sentir impotencia
cuando vemos que alguien disfruta de un bien que nos han robado.
¿Hay delito?
Cacerolear o rechiflar a
alguien en cualquier parte del mundo civilizado no debe ser considerado delito,
siempre y cuando esas acciones no vayan más
allá que consignas y
recriminaciones por determinados hechos, esto es, no pasar al roce físico. Freddy Guevara,
dirigente de Voluntad Popular escribió un tuit
que prendió la polémica
en las redes, en el cual señaló que “no
es correcto acosar a los hijos de funcionarios” Muchos los criticaron pero
otros tantos lo defendieron argumentando que los hijos no pueden cargar con las
culpas de sus padres. Lo cual es correcto. A un hijo no le pueden juzgar por
los hechos de sus padres. El asunto se complica, cuando el hijo es mayorcito y conoce
muy bien de dónde pudo haber salido el dinero con el que su padre le da los
gustos en el exterior.
¿Cómo decirle a un
venezolano que no proteste contra fulano o mengano porque él no tiene la culpa de que su padre
sea un ladrón y, más si ese venezolano que participa en esas protestas se ha
tenido que ir de su país a pasar trabajo en tierras lejanas porque, o está perseguido
o, busca mejores oportunidades debido a que el papá de ese muchacho al cual
ahora persiguen para hacerle “bullying” ayudó a destruir la nación metiéndole la mano al erario público
para comprar mansiones en el exterior y mandar a sus hijos a estudiar en las
mejores universidades del mundo?
No es fácil permanecer
callado ante hechos evidentes. Que se entienda bien, ese muchacho que cuando lo
ven en el exterior lo pitan y le dicen lo que de la indignación le salga al que
lo increpa, es de la misma edad que los miles de jóvenes que vemos a diario
tragar gas lacrimógeno, recibir palizas de la policía, de colectivos y de la Guardia
Nacional, que le han ocasionado cicatrices o lesiones incurables y en muchos
casos han encontrado la muerte luchando por un país mejor; es decir no es un
muchachito inocentico. Él
disfruta fuera de Venezuela del producto de lo robado por su padre, mientras
que el de acá, lucha por un ideal de perseguir un mejor país, ese que el padre
del “acosado” ha destruido. Siendo esto así,
hay que estar de acuerdo en aquella máxima que nos han enseñado que los hijos
no deben soportar las cargas de las malas acciones de sus padres, pues
entonces, que no soporten ninguna carga, esas maletas llenas de dólares las
deberían devolver para poder comenzar a hablar de perdón. El ladrón que se
confiesa de haber robado, si no devuelve lo robado sigue estando en pecado.
El contraste
Cuando me dicen que
fulanita de tal, hija del galáctico está estudiando en Francia y vive en un
apartamento costosísimo no puedo dejar de pensar en el trabajo que pasan
nuestros estudiantes, que si no es por el comedor universitario muchas veces no
pueden comer. Cuando averiguo lo que cuesta un pasaje para Australia y lo
costoso de la vida allá como no imaginarse las miserables becas que reciben
nuestros estudiantes que tampoco tienen como ir de su casa a la universidad ni
de la universidad a su casa si no tuviéramos
el transporte universitario que cada vez está más destartalado.
Comprendo y comparto eso
de que no debemos acosar a los hijos de los funcionarios, pero ¡por Dios!
tampoco es normal verlos sin hacer nada cuando nos estrujan en la cara lo que
sus padres se han robado y ahora lo disfrutan ellos. Acaso podemos creer que
están engañados imaginando que esa
fortuna fue producto de una pensión de teniente coronel, o del sueldo que al
cambio recibe el papá, que en circunstancias normales no supera los cincuenta (50)
dólares mensuales.
¿Ese joven o esa joven
descendiente de enchufado, desconoce el
hambre que están pasando sus compatriotas venezolanos? ¿Sabrá esa gente que en
el país hay muchísimas personas
que se acuestan sin comer, o que se mueren por no tener como comprar un
medicamento, o que en las universidades los laboratorios no tienen reactivos
para poder hacer las investigaciones, y en fin que estamos en ruinas mientras
ellos se dan la gran vida, o que aquí en
Venezuela nos matan y meten preso cuando nos atrevemos a protestar? Es difícil quedarse
como si nada, pienso que hay que
recordarle a estas personas que viven a cuerpo de rey a costa del hambre y la
miseria en la que se encuentra Venezuela, que lo que se robaron tienen que
devolverlo, quizá con eso recuperaríamos todos los hospitales, surtiríamos
todos los supermercados de alimentos, dotaríamos y renovaríamos la flota de
autobuses de nuestras universidades, le pudiéramos
dar una pensión digna a los viejitos, inclusive, hasta los cuerpos de seguridad
civiles y militares tuvieran mejores comedores, se mejoraría el sistema
eléctrico, carreteras, en fin, con esos miles de millones de dólares que se han
llevado, muchísimas cosas materiales se recuperarían en el país. Faltaría
lo más importante, la recomposición
social, la siembra de valores, reparar el peor daño que nos han causado y esto calro que pasa por denunciar
lo que es ética y penalmente incorrecto.
Pienso que las puertas
de la reconciliación tenemos que abrirlas, para eso es necesario la justicia
y el perdón, pero siempre es imperioso que exista el propósito de enmienda,
para así poder aspirar a la reconciliación nacional.
Doble moral
Por último, y para
seguir con el tema del boicot, eso no solo se debe limitar a los que están en
el exterior sino a los que aquí mismito hacen negocios con el régimen y forman sus jolgorios y
conspicuos representante de la oposición aparecen disfrutando del dinero que
ellos saben es producto de la corrupción. Se pasean en yates, aviones o en carros
lujosos de quienes están en desfalcando a Venezuela pero dicen ser de “oposición”,
o sea, criticamos lo que convalidamos con esa permisividad. Debemos ser
coherentes.
Ahora sí, para finalizar, ¿cómo es eso que nos
limitamos solo a protestar y rechiflar a los hijos de los enchufados pero no les
decimos nada a los representantes de esos países que les abren las puertas para
que gasten lo que se han robado aquí en Venezuela? Me consta que muchos
muchachos, con aquilatados principios y valores y, muy bien formados académicamente, han querido irse, por
ejemplo, a Estados Unidos para buscar oportunidades en ese país, pero le han
negado la visa porque no pueden justificar su manutención, sin embargo le abren
los brazos a los que ellos saben han devastado a Venezuela. Doble moral. Difícil
lo que vivimos y hoy más que nunca debemos comprender que de esto saldremos los
venezolanos, no contemos con más nadie, cada país apuesta a sus intereses
particulares y no al de los pueblos sufridos.
Señores: a seguir
tendiendo puentes con los militares antes que terminen de destruir lo poco que
queda de institucionalidad en algunos componentes de la FAN. No para que den un
golpe de Estado sino para que no sigan prestándose para la destrucción de
nuestra amada Venezuela.
Pablo Aure
No hay comentarios:
Publicar un comentario